A partir de fibras naturales como la pulpa de madera y/o papel reciclado, la industria produce papeles tissue de alta calidad y suaves al tacto, como pañuelos faciales, papel higiénico, toallas de papel, servilletas, y otros productos de uso cotidiano. Por otro lado, la industria del papel kraft se centra en la producción de cartón que es un tipo de papel resistente y duradero utilizado en la fabricación de bolsas de papel, envases, cartones corrugados y como material de embalaje resistente.

Aunque estas dos ramas de papel difieren en sus procesos de producción, ambas requieren un buen acompañamiento químico-técnico que permita aprovechar al máximo la materia prima, mantener un proceso de producción controlado y obtener productos de la calidad deseada.